TERAPIA DE PAREJA

La vida es, toda ella, una escuela en la que la asignatura de fondo, la que permea todas las demás, es aprender a amar y es en la pareja donde el amor puede adquirir su expresión más completa.

Pasar del enamoramiento al amor, construir el nosotros, atravesar por las crisis individuales, familiares y de la pareja requieren valor y la sabiduría.

La terapia de pareja aumenta nuestra capacidad de amar, fomentando nuestras fortalezas, (llevándonos a ser más nosotros mismos) y amplia la capacidad de comunicarnos, la empatía, la apertura (llevándonos a mayor capacidad de comunión con el otro).

Los muchos maridos, esposas, novios y novias  que me  concedieron la oportunidad de caminar a su lado cuando en sus relaciones la noche se hizo oscura, me enseñaron  que es mejor  una definición amplia de la terapia de pareja. Una que yendo más allá de ambos miembros asistiendo a psicoterapia, es el viaje de transformación del vínculo hacia  grados nuevos de encuentro. Eso se da muchas veces con uno de ellos acudiendo a consulta y es así porque cada uno de nosotros influye más de lo que sospecha en los demás. Si uno cambia, sus relaciones cambian.

En suma se trata de crecer, potenciar lo sano  y disolver  los obstáculos al amor.

Principales obstáculos:

– Conflictos irresueltos con la figura materna y paterna que llevan a repetir de forma inconsciente patrones inadecuados.

– Conflictos irresueltos con anteriores parejas que llevan a actitudes defensivas, huida, desconfianza, culpa o venganza inconsciente.

– Conflictos con la propia imagen, falta de autoestima, falta de claridad respecto a quien soy, que quiero y hacia dónde me dirijo.